La carabela portuguesa llega a Mallorca
Pensamos el mar es una gran piscina, pero un día en la playa puede convertirse en una experiencia desagradable. Las quemaduras solares e imprudencias en el agua son los principales riesgos según los socorristas profesionales que velan por nuestra seguridad. En el mar viven muchos seres vivos, y no debemos extráñanos que ocasionalmente algunas visiten las playas de baño.
La carabela portuguesa (Physalia physalis) es ser vivo colonial (Siphonophora) formado por pequeños animales zooides (hidroides) pluricelulares que se han especializado en diferentes funciones: flotación, digestión, captura de presas y reproducción. Por el contrario, las medusas son organismos pluricelulares con distintos órganos, como los seres humanos.
Los Siphonophora incluye varias especies que son presentes en el Mediterráneo, sobre todo en zonas de aguas profunda. La carabela portuguesa vive en regiones tropicales y subtropicales de todos los océanos del Planeta, pero es rara en el Mediterráneo, visitando ocasionalmente nuestras costas en mayo y junio.
Las carabelas portuguesas viven flotando en la superficie del mar, empujadas por las corrientes y el viento, capturando sus presas con largos tentáculos (el dactilozoide). Unas células del tentáculo se han especializado en inocular un veneno que paraliza a sus presas. Estos tentáculos son los causan las temidas picaduras a los humanos.
La Dra. Rosa Taberner, especialista en dermatología, nos recomienda no frotar la zona y retirar todos los restos del tentáculo adheridos a nuestra piel. Se debe aclarar con agua de mar, pero nunca con agua dulce, que activa las células inoculadoras de venenos. Aplicar frío ayuda a reducir la inflamación y, sobre todo, acudir a un centro médico.
Para más información sobre los efectos de la picadora y que hacer, os recomendamos el blog Dermapixel.
Lo más importante es la prudencia y seguir siempre las recomendaciones de socorristas, o el personal de nuestras embarcaciones. Recordad que el mar no es una piscina y que tenemos que compartirlo con otros seres vivos.